Los
usurpadores del gobierno de la Rca. del Paraguay se niegan a
admitir una derrota electoral que los pone fuera de la
posibilidad de seguir esquilmando al país. Han impugnado algunas
actas electorales que no tienen la menor indicación de que hayan
habido irregularidades en el proceso de votación y conteo, y lo
hacen simplemente para ganar un poco de tiempo antes de su
desplazamiento, o tal vez lo hagan los apoderados de los `perdedores
para intentar cobrar algo más de honorarios.
El
intento no tendrá otro resultado que retardar la hora del cambio,
puesto que es inconcebible que un magistrado, salvo que sean los
comprados por el oficialismo, se preste a una maniobra tan burda y
tan sin sentido.
Los
usurpadores de marzo, los responsables verdaderos del fusilamiento
del cadáver del Dr. Luis María Argaña y los asesinatos de la
plaza del Congreso en el lúgubre marzo de 1999, están quedando al
descubierto, y los votos del domingo 13 de agosto pasado amenazan
con dejarlos sin máscara. La derrota electoral hace que deban
entregar el gobierno al vencedor, y están dispuestos a destrozar la
República y sus instituciones, pisotear la Constitución y las
leyes hasta las heces, antes de hacerlo.
¿Qué
es una impugnación? Todo el mundo debería saberlo. Es discutir los
alcances de un acta electoral, en cuanto a resultados, que se
asienta sobre la observación de irregularidades anotadas en ellas.
En las actas que impugnan los usurpadores no existen observaciones
de ninguna especie, porque traducen lo que fue la realidad; una
votación pacífica, tranquila y absolutamente regular, en la cual
el pueblo, sin
desplantes, ni incidentes, depositó su voluntad en las
urnas. Las impugnaciones son absurdas y serán rechazadas sin
ninguna duda, a no ser que los usurpadores puedan comprar a alguno
de los tres miembros del STJE.
De
hecho el Dr. José Felix Fernández Estigarribia, lainista, acudió
al despacho del Dr. Alberto Ramírez Zambonini, a gestionar, en
nombre de su lider el Dr. Domingo Laíno, la aceptación de las
impugnaciones. El Dr. Fernández Estigarribia fue Ministro de
Relaciones Exteriores del oficialismo y recibió se dice que
como premio a su adhesión a los usurpadores, unas cuatro mil hectáreas
de tierra a cambio de una suma simbólica.
Se
dice que el Dr. Ramírez Zambonini de procedencia lainista
rechazó la pretensión del Dr Fernández Estigarribia, bastante
molesto por el pedido absolutamente inmoral del ex canciller y
actual senador por el lainismo.
Entretanto,
los tramposos de siempre, consubstanciados con el fraude electoral
de antiguo, siguen impugnando actas en forma sistemática, excepto
aquellas en las que habían ganado.
Todos los observadores internacionales han dado fe que las
elecciones del 13 de agosto han sido limpias, libres, pacíficas,
ordenadas y sin reproche. Solo el grupo de usurpadores, que se
resiste fieramente a entregar el gobierno porque entonces tendrán
que rendir cuentas de sus innumerables fechorías, siguen intentando
retrasar la hora de la verdad, que ya ha sonado para ellos.
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