OVIEDO EN
PARAGUAY?
Alberto Vargas Peña (miembro de la Fundación Libertad)
El gobierno usurpador paraguayo se pasó vociferando que quería al
Gral. Lino Oviedo en el Paraguay para "meterlo en una jaula" como sostenía
Nelson Argaña, actual ministro de Defensa.
El usurpador Luis González Macchi se desgañitó en cuanto foro
internacional le fue permitido asistir porque no lo invitan a menudo y lo desairan
casi siempre hablando mal de la Argentina porque había concedido a Oviedo asilo
político, como corresponde desde luego a la tradición latinoamericana y las leyes que
rigen la materia.
A pesar de todo lo dicho por el gobierno paraguayo, Oviedo nunca fue
sometido a un debido proceso judicial, de modo que fue desde el mismo comienzo un
perseguido político.
Ahora Oviedo, motu proprio, decide abandonar su asilo en Argentina y
regresar al Paraguay, clandestinamente por supuesto. Y González Macchi y su pequeño
canciller ladran a la Luna acusando al ex presidente argentino Carlos Menem, de
"haber posibilitado la fuga" de una persona que no tenía ninguna restricción
de su libertad personal.
Y encima, finge que no asistió a una cena a la cual no fue invitado,
por el disgusto que le causó la venida de Oviedo al Paraguay. ¿En qué quedamos?
¿Lo querían aquí o no?
En realidad no se sabe si Oviedo está o no en el Paraguay. Su avión
partió de un aeropuerto cierto y se desvaneció en el aire. Nadie sabe donde aterrizó.
¿Es eso creíble?
El avión, que tenía necesariamente matrícula argentina, ya debe
haber regresado a su base. El piloto tiene que ser conocido. Tendrá que justificar su
plan de vuelo, que no podía ser internacional, puesto que si hubiera tenido esa
característica tendría que haber pasado por Ezeiza o por el Pucú o por el aeropuerto de
Formosa. ¿Entonces, como es que no se sabe donde aterrizó con Oviedo?
Yo tengo mi opinión personal sobre el tema. Los argentinos sabían
adonde iba Oviedo, y si ellos lo sabían también lo sabían los brasileños y uruguayos.
La afrenta que le hicieron Sanguinetti y Battle a Gonzalez Macchi, y las declaraciones del
vicepresidente argentino reproducidas por La Nación de Asunción, demuestran que hay una
llamativa concordancia entre los gobiernos legítimos del Conos Sur.
Entonces, la venida de Oviedo al Paraguay si es que vino
no es una acción descabellada sino concertada. Chacho Alvarez dijo algo muy llamativo:
" los americanos dicen que la popularidad de Lino Oviedo crece en el Paraguay".
¿Por qué lo diría?
El Paraguay, tal como está, es impresentable. Es necesario que se
convoque a elecciones ya. Si ese es el caso, Lino Oviedo es vital para los intereses
colorados, puesto que en sus manos está hacer la unidad o no de ese partido, con vistas a
las elecciones. No me extrañaría que Oviedo haya aterrizado en la pista de la estancia
de Wasmosy, y se encuentre escuchando las propuestas de los desesperados "gobernantes
de marzo".