Un
feroz ataque contra el senador Dr. Luis González Macchi y el
vicepresidente de la Rca. Dr. Julio Cesar Franco, puso de relieve
ayer seis de febrero , la existencia de una especie de complot
contra ambos funcionarios, que busca su desalojo del poder y el
supuesto a llamado de elecciones generales, o, en su defecto, la
elección de presidente de la República por el Congreso.
¿De donde viene el golpe? Es opinión general que viene de
parte de Juan Carlos Wasmosy, ex presidente de la República sobre
quien pesan acusaciones de toda clase y se halla al borde de una
sentencia de prisión de ocho años, por vaciamiento del Banco
Nacional de Trabajadores.
Se
considera que la acción proviene del lado de Wasmosy porque fue
utilizada la Radio Uno, de su propiedad, motorizada por Esteban
Samaniego, un senador wasmosista insertado en el Movimiento
Reconciliación Colorada, y porque impulsa la candidatura de Juan
Carlos Galaverna, conocido operador político del wasmosismo.
Juan Carlos Wasmosy, desde su salida de la presidencia de la
Rca. se ha dedicado a fomentar todo tipo de acciones
desestabilizadoras de la democracia, en la búsqueda del
mantenimiento sine die de sus complejas relaciones comerciales con
el estado paraguayo.
Wasmosy
es, de lejos, el hombre más rico del Paraguay y su fortuna se
calcula en unos dos mil quinientos millones de dólares, todos
habidos gracias a esa especial relación. En el año 1974, el Ing.
Juan Carlos Wasmosy era casi un indigente, cuya empresa Tomboly y
Wasmosy había quebrado dejando deudas por todas partes.
Antes
que eso, Juan Carlos Wasmosy era un entenado de la familia Jiménez
Gaona, que se ocupó de su manutención y educación, ya que su
padre estaba en la miseria.
Wasmosy, durante su presidencia recibió el apoyo del
presidente William Clinton y terminada ella, conspiró para derribar
el gobierno de su sucesor, el Ing. Raúl Cubas.
La
conspiración tuvo éxito y Wasmosy colocó en el poder al Dr. Luis
González Macchi, gracias indudablemente al apoyo irrestricto
recibido de la embajada de los Estados Unidos de América. Ahora las
cosas parecen haber cambiado y Wasmosy pretende cambiar su propia
obra.
La conspiración actual tiene como objetivo derribar al
gobierno y evitar la sucesión constitucional, a pesar que se
rumorea que el vicepresidente, en algún momento y a través de su
asesor Armando Espínola, acordó ciertas normas de conducta con
Wasmosy.
Ahora
los personeros del ex presidente acusan al Dr. Franco de cobrar
doscientos mil dolares mensuales en sobornos proporcionados por Luis
González Macchi.
Wasmosy
mantiene fuertes relaciones con parte de la cúpula militar, a la
que tiene a sueldo, especialmente en la Fuerza Aerea y pretende
hacer nombrar ministro de Defensa a su operador militar el Gral. de
la Fuerza Aérea César Cramer.
Ninguna
de las acciones de Wasmosy es alocada o impensada, y este ataque al
presidente y vicepresidente de la República no puede ser tomado a
la ligera.
En un momento en que todo se desmorona en el Paraguay, una
acción de este tipo es extremadamente peligrosa. Y Wasmosy ya ha
triunfado una vez.
|