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LA DETENCIÓN DE MAX NARVAEZ

Alberto Vargas Peña (miembro de la Fundación Libertad)

Max Narvaez es un abogado paraguayo que representa a Lino Cesar Oviedo como vocero del movimiento UNACE que lidera el general que se encuentra en la clandestinidad. Es un hombre de letras, autor de varios ensayos, educado, correcto y sin ningún antecedente de violencia de ninguna clase; es la antítesis del agitador profesional español ignorante y violento llamado Francisco de Paula Oliva.

Max Narvaez, paraguayo, fue detenido por la Policía, sin orden

judicial, a las nueve de la noche – horario prohibido para detener a nadie según el Código Penal – por "encontrarse en el lugar equivocado" según las declaraciones del Ministro del Interior Walter Bower, quien ha escrito un nuevo Código Penal.

Fue conducido a una mazmorra pestilente de la Dirección de Investigaciones, resucitada por este régimen de marzo, de donde fue rescatado por una fiscal del crimen a las tres de la mañana siguiente. La fiscal, la Dra Lourdes Samaniego ha sido ya vituperada y amenazada por el senador wasmosista Francisco José de Vargas.

¿Cuál fue el crimen de Max Narvaez? Supuestamente transitar por una calle de Asunción a la que supuestamente no debería tener acceso. Como toque de astucia, la Policía lo acusó de portar un arma que Max Narvaez no había visto jamás. El proceso abierto dice "alteración de la paz pública" un delito incluido en el nuevo Código Penal, que sirve, bajo este régimen dictatorial que nos oprime, de ley garrote.

El crimen de Max Narvaez es otro: Es oviedista confeso. Es un opositor, un outsider. No comulga con el régimen de marzo como el 90% de los paraguayos. Y este es un crimen imperdonable. Aquí, gracias al incansable apoyo de los Estados Unidos de América a este gobierno ilegítimo y usurpador, dictatorial y sangriento, no se puede disentir; no se puede discrepar. En la democracia que nos endilgan Clinton, Peter Romero y McFarland, los que discrepan son criminales y deben ser tratados como tales.

¿Hay algún parecido con el stalinismo? Pura casualidad. ¿Qué hay identidad con el nazismo? Asunto involuntario. ¿Qué es stronismo puro?

Y bueno, como no habría parentezco si son los hijos de Stroessner los que están en el poder tan celosamente custodiado por los Estados Unidos de América y por el Imperio del Brasil.

Me pregunto frente a esto como es posible que a Max Narvaez se le ocurra transitar por las calles de Asunción, reservadas a las hordas bastardas y ebrias – cuando no drogadas – de Francisco de Paula Oliva SJ.

Lo inteligente, en estos casos es quedarse en su casa, a esperar tiempos mejores. Cuando las SA o las SS están sueltas, hay que buscar refugio.

Lo maravilloso del caso es que los países vecinos, que se enorgullecen de sus democracias, ven lo que ocurre aquí y desvían la vista. Estos paraguayos son tan salvajes, se dicen, que hay que dejar que revienten solos. Y en todo caso, están tan acostumbrados a la dictadura que una más no les hará daño.

La detención de Max Narvaez no es sino un paso más en la profundización de la dictadura que se instaló en marzo de 1999 y que por lo visto, antes de que la echen, piensa recorrer el mismo sangriento y aterrador camino de todas las anteriores.