CONGRESISTAS
ESTADOUNIDENSES EN ASUNCIÓN
Alberto Vargas Peña (miembro de la Fundación Libertad)
Una delegación de la Cámara de Representantes de los Estados Unidos
de América vendrá a Asunción, presumiblemente el lunes 17 de enero, con una agenda
secreta, que permite todas las especulaciones. ¿Por qué secreta? Porque la oficina del
senador Jesse Helms, consultada sobre el tema y sobre la lista de viajeros, se negó a
contestar. ¿Conoce alguien la verdadera agenda de los inspectores?
Me pregunto qué vienen a hacer los estadounidenses. Si vienen a pedir
elecciones ya, conforme las declaraciones permanentes de su gobierno, serán bienvenidos
por los unos y anatematizados por los otros; si vienen a apoyar al gobierno ilegítimo y
usurpador no lo digo yo, lo dicen el artículo 234 y el 138 de la Constitución
entonces serán vivados por los otros y excecrados por los unos. Pero, ¿es que
tienen derecho de hacer una u otra cosa?
En teoría tendrían que venir a defender la democracia. Los Estados
Unidos le dicen a todo el mundo que son el país de la libertad, la cual tienen derecho de
defender en todo el mundo. Está claro que si vienen a exigir elecciones a un gobierno
golpista, estarían dentro de la filosofía que los llevó a Europa dos veces durante el
siglo pasado y a pelear innumerables batallas secretas contra la desaparecida
superpotencia totalitaria.
Pero si hemos de pensar en lo ocurrido en los últimos tiempos en el
Paraguay, en el que la Embajada de los Estados Unidos de América conspiró para derribar
al gobierno constitucional, entonces uno se pone a temblar. Lo único que mantiene en pié
a este gobierno ilegítimo y usurpador es el apoyo de la Embajada de los Estados Unidos.
Si encima vienen los Representantes del pueblo estadounidense a hacer lo mismo, el
Paraguay se puede despedir de su democracia y su libertad.
Una pregunta me inquieta: ¿Queremos los paraguayos ser protectorado
estadounidense? ¿ Y si aceptáramos dócilmente el protectorado sería para ser libres
como ellos o simplemente esclavos de sus ""son of a bitch"? ¿Sigue en pié
la doctrina de Roosevelt, que decía que era más fácil conseguir lo que se quería de un
gobierno no democrático? Roosevelt fue el presidente democrático de los Estados Unidos
que entronizó a Somoza en Nicaragua, protegió a Trujillo en Santo Domingo, mantuvo en el
poder a Morínigo en el Paraguay, porque eran sus propios "son of a bitch".
La doctrina del Roosevelt democrático convirtió a América Latina en
un inmenso caldo de cultivo del comunismo, solamente por resistir a los estadounidenses. Y
parece que ahora, con el democrático Clinton se vuelve a las andadas.
Fue la embajadora de Clinton la que derribó al gobierno constitucional
y lo reemplazó por el gobierno ilegítimo y usurpador. ¿Vendrán los representantes a
condenar la política de su presidente o a apoyar a los nuevos "son of a bitch"
que tienen en propiedad?
En realidad uno no puede estar indiferente a la llegada de los
emisarios del gigante. Lo que digan y hagan será prácticamente decisivo. Si vienen a
restaurar la democracia, ella será restaurada; si vienen a apuntalar la dictadura, ella
prevalecerá, mal que nos pese.