MEDIOS
abcboton.jpg (1386 bytes)
uhora.jpg (2856 bytes)
noticias2.jpg (3920 bytes)
front-logo-dia.jpg (3564 bytes)
logo-teveo.jpg (1167 bytes)
nacion.jpg (9869 bytes)

PORTALES

planet1.jpg (2155 bytes)

conexion1.jpg (2166 bytes)

highway1.jpg (1877 bytes)

multinet1.jpg (2038 bytes)

pol1.jpg (6530 bytes)

quanta1.jpg (2636 bytes)

supernet1.jpg (2199 bytes)

telesurf1.jpg (2011 bytes)

loguito.gif (5533 bytes)

Si los link están protegidos por derechos de copia, serán removidos a soicitud del propietario

HAGA CONOCER SU OPINIÓN

 

 

DENUNCIAS DE NUEVOS ATENTADOS

Alberto Vargas Peña (miembro de la Fundación Libertad)

Aunque ya la Policía se ha encargado de aclarar la naturaleza de las denuncias de dos informantes – y delincuentes – de la Secretaría Nacional Antidrogas, conviene analizar el por qué esta denuncia fue tomada en serio por la Oficina de Denuncias del Senado y dada a conocer públicamente por el senador Luis Alberto Mauro, del Encuentro Nacional.

Los hechos de marzo de 1999 fueron preparados, en mi opinión, desde mucho antes, mediante un vasto y sistemático "operativo de prensa", que era alimentado y refrendado por declaraciones de políticos comprometidos en la conspiración. Se que los pueblos tienen poca memoria, pero los hechos que menciono son recientes, y nadie puede olvidar las declaraciones que hablaban de asesinatos – señalando específicamente al Dr Argaña como el blanco – e incluso de la inminente formación de un "gobierno de unidad nacional en un plazo de seis meses".

No voy a hacer nombres porque todo el mundo sabe en el Paraguay quienes fueron los que impulsaron el "operativo de prensa", en qué periódicos y radios fue realizado, y quienes fueron los políticos que anunciaron el asesinato – si es que fue asesinato-.

Todo el mundo sabe quienes fueron objeto de atentados fraguados, que si bien no lastimaron a nadie, prepararon el clima para lo que vendría después. Y todo el mundo sabe quien anunciaba, como Nostradamus, la inminente aparición de un "gobierno de unidad nacional".

La denuncia de los dos delincuentes menores, que a la vez son informantes de la SENAD, fue recibida como cierta y atendible por la Oficina de Denuncias del Senado y se convocó a una conferencia de prensa para darle la máxima difusión.

La policía, al día siguiente aclaró que se trataba de un enfrentamiento entre pandillas rivales, pero la semilla ya estaba echada. Un nuevo "operativo de prensa" se montó alrededor de la nueva operación y ya han comenzado a reavivar el fuego del odio. El objetivo de la difusión de la falsedad, es llamar a engaño.

Una Oficina de Denuncias seria, antes de hacer pública una, investiga su naturaleza y origen. La ODS no tiene la menor intención de hacer eso desde que es utilizada para la persecución política. Una cosa buena tuvo la denuncia: la aparición del verdadero Jorge Acosta, comprador del famoso Fiat Tempra, que es todavía el protagonista del atentado contra Argaña.

Llamo la atención de mis lectores sobre la nueva operación -¿cómo se llamará ahora? – montada desde la ODS.