EL CRIMEN TIENE
LÓGICA
Alberto Vargas Peña (miembro de la Fundación Libertad)
Si algo ha demostrado la ciencia criminalística es que el crimen tiene
lógica. Hasta el más extraño de los crímenes, siempre hay un vínculo con el criminal.
En lo que se refiere a crímenes políticos, no hay excepción a la regla. Lo comete el
que espera beneficiarse con él.
El asesinato, o el pseudo asesinato, del Dr Luis María Argaña,
Vicepresidente de la República al día de su deceso, no puede escapar a la lógica que
tienen todos los crímenes políticos. Su posición, sus ideas, sus posturas, incluso su
cargo, todo está señalando quien fue o quienes fueron sus asesinos o lo que aprovecharon
su muerte. No voy a descartar la posibilidad de que con Argaña se haya disparado sobre un
muerto, porque esa posibilidad existe y explicaría muchas cosas.
La pregunta es ¿ por qué el presidente Cubas o el Gral Lino Oviedo
querrían matar a Argaña? ¿Estorbaba Argaña la gestión de gobierno? ¿ Era un peligro
para el gobierno de Cubas? ¿Tenía una preponderancia visible en el electorado? ¿Era una
figura creciente, que inevitablemente barrería con el gobierno?
Argaña, al contrario de lo que se piensa, era el único seguro que
tenía el gobierno contra el Congreso que quería destiotuirlo. "Mientras Argaña sea
Vicepresidente habían dicho connotados legisladores radicales auténticos
no votaremos el juicio político a Cubas." Lo dijeron públicamente Armando Espínola
y Atilio Martinez Casado. Sin el voto de estas personas no podría haber juicio político
al presidente Cubas y Argaña no podría acceder a la presidencia de la República.
¿Existía una enemistad insuperable entre Lino Oviedo y Argaña? Al
parecer no, porque los últimos días de Argaña fueron de intensas negociaciones con Lino
Oviedo, en la búsqueda de una alianza que eliminara a Juan Carlos Wasmosy de la arena
política republicana.
Si para alguien Argaña era un obstáculo era para quienes querían
acceder al gobierno y necesitaban, o del juicio político al presidente de la República o
un golpe de estado.
¿Quiénes estaban organizando el golpe de estado militar? Juan Carlos
Wasmosy. Hay confesiones públicas de connotados militares, que se encontraban prestos a
dar el golpe. ¿Quién más? La coalición del Congreso, con Francisco José de Vargas a
la cabeza en el Senado y Marcelo Duarte en Diputados, ambos wasmosistas. Wasmosy ya había
organizado un golpe en abril de 1996 y responsabilizado a Oviedo, e intentado otro el 10
de mayo de 1998, apoyado por el Gral Cramer, de la Fuerza Aerea. Falló el llamado a la
salida a la calle hecha por un Domingo Laíno completamente fuera de sí.
Argaña era un obstáculo insuperable mientras estuviera vivo, para
todas las fuerzas que querían derribar al gobierno constitucional, porque su figura no
era admitida por quienes tenían la llave del juicio político en el Congreso. Con Argaña
vivo, habría que dar un golpe militar; con Argaña muerto, triunfaría un golpe del
Congreso. Ya no habría impedimentos para el juicio político y la destitución de Cubas.
Argaña murió en algún momento entre las dos de la mañana y las ocho
y treinta del 24 de marzo de 1998. El obstáculo estaba removido. El gobierno cayó el
domingo 28 de marzo. ¿Qué están gritando, con su voz más clara, estos acontecimientos?
Yo creo que el crimen tiene una lógica que no se quiebra. Y la lógica
de lo sucedido me indica hacia adonde mirar para encontrar a los responsables.